El porqué de esta lección surge de un conflicto que surgió en una formación cerrada que di a un grupo de profesoras.
En el momento en que inicié la formación, me di cuenta de que los contenidos que enseñaría no les serían de utilidad, ya que identifiqué patrones recurrentes en cada una de ellas, como:
Y fue una parte fundamental que permitió a cada profesora de yoga primero aplicar los contenidos que iban a aprender y, al mismo tiempo, inspirar a sus alumnos y sentirse profundamente conectadas con su propósito.
Si estas leyendo esto hoy, es muy posible que lo hayas pedido al universo.
No podemos inspirar, atraer y magnetizar a nuestros alumnos si en el fondo de nosotras mismas nos sentimos sobrepasadas, inseguras, nos percibimos como inadecuadas o necesitadas.
Aquí está el porqué: Mi nombre es Jenny Tenjo y, hace un tiempo, estaba absolutamente agotada, quemada y en un bucle de agotamiento y supervivencia.
Todo empezó cuando vivía en Hong Kong en el año 2011, donde sentía que había logrado todo lo que yo había querido: vivir de dar clases como profesora de danza y yoga ganando muy bien.
Pero, todo lo había logrado desde la energía de la competencia, el deseo de validación externa y el de sacrificarme por conseguir el «logro».
Y aunque había alcanzado mis sueños y ganaba extremadamente bien, no estaba bien.
Cuando no pude más, enfermé y viví un proceso largo de sanación femenina interna que me ayudó a entender con el tiempo cómo lograr resultados de forma que pudiera atraer, sin sacrificio, a alumnos, influencia y, por supuesto, seguir viviendo de lo que amo hacer:
Con el tiempo, con las canas, con los años y la experiencia, refiné esta forma, el arte de magnetizar y enamorar a nuestros alumnos.
Lo que vas a ver en este video es uno de los ingredientes para que lo demás que ya sabes funcione y se potencie sin tanta lucha ni complicación.
Lo que te cuento aquí es lo que me ha permitido vivir en más de 5 países, entrar joven a una compañía profesional de danza, hacer 2 carreras profesionales, montar dos estudios de yoga, dos negocios online y formar a otras mujeres bajo una filosofía de yoga para la vida y no solo para la esterilla.
Al inicio de mi vida, nos sabía que lo tenía por eso lo usaba mal y desde la fuerza bruta pero con las crisis, los golpes que te de la vida y el trabajar con otras mujeres he logrado transmitirlo desde la experiencia creadora de vivirlo y enseñarlo cada día.
Las profesoras que lo han aplicado hoy mismo están explotando ese poder y brillan como formadoras de bienestar; las que no lo aplicaron no tuvieron ninguna transformación.
Porque es así, solo si lo practicas podrás ver el cambio. Si solo escuchas, pero no haces nada. No sucederá nada.
Es como si una persona quisiera aprender yoga solo con leer un libro, pero nunca practique con su cuerpo.
Quizás sea porque tu alma esté pidiendo liberarse del esfuerzo exagerado al que has llegado casi sin darte cuenta.
Y que poco a poco en tu vida se va tornando en un «tengo que» y un «debo que» forzado, arrastrándote sin quererlo a sentirte cada día más agotada, más cansada y desmotivada.